LOS PECES DE LA AMARGURA a404g

Unas garras de padre en sus rutinas y de los seguidores, gusta cuidar los peces, para sobrellevar el disturbi de una chica hospitalised e inválida; unos fines de boda fastidiado para el hostigamiento del fanatics contra un vecino y esperar que esto decide en dejar ; un hombre hizo todo el posible de modo que no lo señalan, y vivir aterrado de modo que todos le dan el atrás; una mujer decide ir con su yarns sin comprender cómo venido asediarlo. Es difícil de comenzar en leer las historias en principio modestas, de una simplicidad engañosa de los peces de la amargura, y no para oír no conmovido, sacudido –a veces, indignado– por la verdad humana para pequeño aquello está hecho, un asunto extremadamente doloroso para así y así víctimas del delito basado en la excusa política, pero que sólo un narrador excepcional y Aramburu logra para contar de manera verídica y creíble. La variedad y originalidad de los narradores y de las aproximaciones, la riqueza del personages y sus experiencias distintas logran para componer, en manera de coral novella, un cuadro imborrable de los años de emploma y sangre aquello ha vivido en Euskadi 1c2gl